DESODORANTES ECOLÓGICOS

Después de mi emocional primera entrada, te puedes preguntar: bueno, qué rico es consumir mejor y cambiar mi estilo de vida, pero ¿cómo hago?. La misma pregunta me hice yo al comienzo y, curiosamente, uno de los primeros cambios que hice en mi vida fue el desodorante. ¿Y por qué?

Si me pidieran hacer un top 3 con los productos de aseo personal más dañinos, sin duda alguna pondría al desodorante como indiscutido ganador.

Empecemos por los envases: si no vienen en plástico desechable, los consigues en envases de aluminio. Así que, de entrada, cuando se termine el producto, nos vamos a tener que matar la cabeza pensando cómo reciclarlo o reutilizarlo (en caso de que realmente se pueda hacer).

 Las axilas están muy cerca de, prácticamente, todos los lugares vitales: la cabeza, el corazón, los pulmones y las mamas y los desodorantes que consigues en el supermercado están repletos de ingredientes (he llegado a contar más de 30 en un sólo frasco y, cabe aclarar, ninguno con propiedades terapéuticas o beneficiosas para el cuerpo), especialmente de parabenos (un conservante muy utilizado que estimula la producción de tumores cerebrales, mamarios y gastrointestinales) y aluminio (el ingrediente encargado de no dejarte sudar y que, al acumularse, aumenta el riesgo de padecer enfermedades como el Alzheimer o tumores en la cabeza).

 Aunque no lo creas, tu piel es un órgano vivo que debe alimentarse y, por eso, funciona como una esponja. La piel tiene la capacidad de absorber todo lo que pongas sobre ella. Así que imagina el efecto coctel que estás ocasionando en tus axilas cuando te aplicas el desodorante.

Además, el desodorante crea una barrera entre las axilas y el ambiente que te impide sudar. Todas esas bacterias, sumadas a la cantidad de químicos tóxicos que te estás echando en 5 cms de piel , se van acumulando en el organismo, haciéndote enfermar.  Sudar es una función natural básica y necesaria para tu cuerpo, te ayuda a mantener un ph estable, regula tu temperatura corporal y te ayuda a depurar toxinas.

Si realmente quieres hacer el salto de una opción convencional a una opción ecológica, no te niegues a darle un "periodo de adaptación", porque es lógico que tu cuerpo quiera sacar todo lo que tienes acumulado desde hace años.

Al principio puedes sentir algunas molestias como sudoración excesiva o malos olores. Por eso, carga tu desodorante a todos lados si no te siente segurx y úsalo las veces que necesites. Recuerda que todo pasa y, después de eso, no lo vas a querer cambiar. Con un organismo limpio y el uso de un antibactetriano natural como el aceite de coco, va a funcionar a la perfección.

En internet puedes encontrar cientos de opciones para aplicarte en las axilas. Nosotros tenemos esta belleza, que puedes conseguir aquí y que se usa exactamente igual que un desodorante convencional. Hacemos envíos a todo Colombia y puedes hacer tu pedido por DM.


Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares