6 consejos para mejorar tu relación con la menstruación

Por: Laura, fundadora Familia Comepasto. 

Este mes hemos visto en redes sociales  una bella campaña de educación y visibilización de temas relacionados con el ciclo menstrual. Esta cuestión me apasiona y nos quisimos sumar a la iniciativa donando 20 copas menstruales a mujeres de barrios vulnerables de Pereira, Dosquebradas y Santa Rosa de Cabal. En tiempos de crisis nadie ayuda económicamente a las mujeres para pagar nuestros productos de higiene menstrual, aunque son tan necesarios como la comida y el jabón. 

 

 

Yo era de las que odiaba la menstruación muchos años antes de tenerla. Cuando me llegó por primera vez mi desprecio se intensificó y durante muchos años sentía que el periodo y yo no habíamos nacido para estar juntos. Lo peor era que no tenía ni idea sobre mi cuerpo ni mi sexualidad y esta ignorancia me ayudaba a alimentar mi odio hacia los úteros y la sangre.

Pero lo bueno de la vida es que siempre nos da una oportunidad de cambiar. Mientras buscaba un método anticonceptivo libre de hormonas y seguro para la salud, empecé a entender que muchas de las cosas que había pensado toda mi vida sobre el ciclo femenino eran falsas.

La primera y más nociva es la idea de que sobre el periodo es mejor no hablar y cuando se hace es mejor hacerlo en voz baja. ¿Por qué hay que callar ante un hecho natural más poderoso que orinar, comer o pensar? La menstruación no es solo sangre y cólicos: es una expresión del ciclo de la vida. Hay una época del mes en las que somos primavera, cuando acaba de terminar el periodo y sentimos como si hubiésemos vuelto a nacer. Después llega el verano, la fase ovulatoria donde estamos conectadas con todo y tenemos más energía. El otoño trae consigo cambios hormonales y entramos en los días previos al periodo, nuestro cuerpo nos empieza a pedir más descanso. En invierno llega la sangre y con ella las ganas de estar en casa, conectadas con nuestro lado más creativo e intuitivo. Y todo esto no me lo estoy inventando yo. Son cosas que las mujeres hemos sabido a través de los siglos pero que a la publicidad no le interesa que sepamos.

Otra idea que mucho tiene que ver con la anterior es la de que tener el periodo es algo malo, incapacitante e incómodo. No hay nada más falso. Una buena planificación antes de la llegada del periodo es esencial para vivirlo de forma dichosa y a las marcas de toallas y tampones les conviene que te sientas incómoda cuando menstruas para que tengas que consumir más productos buscando confort.

Así podría quedarme hablando sobre todos esos lugares comunes en los que caemos mujeres y hombres. Ante esto sólo queda educarnos por cuenta propia y motivarnos a normalizar estos temas frente a nuestra familia y amigos. Ahora sí, después de toda esta apología-aclaración-sermón te cuento cuáles son los 6 consejos esenciales para llevar una menstruación plena, sana, cómoda y feliz. Porque ahora nada me hace más feliz que menstruar y cada mes recibo estos días con muchas ansias. Pero para llegar a este punto hace falta, como decía, un poco de organización y educación que en países como el nuestro sólo es posible obtener por cuenta propia:

1) Lleva un calendario donde puedas anotar tus días fértiles y los días que menstrúas: Puedes hacerlo en cualquier almanaque, organizador, aplicación o comprar uno especial para ello. En Colombia hay muchos colectivos que sacan el suyo, los que más me gustan es el de Woman Alchemy y el de Azul Debolsillo, ya que son fáciles de llenar. La idea es que con estos datos puedas prepararte para cada fase de tu ciclo y, ante todo, entender qué está pasando en tu interior en cada una.

2) Saca ya de tu vida los productos para la menstruación desechables: Aparte de estar hechos para que sangremos más, son demasiado incómodos, caros e inseguros (piensa en los hongos por el uso de toallas o el síndrome de shock tóxico con el tampón). La huella de basura de las mujeres menstruantes es enorme, pero todos estos residuos se pueden evitar con facilidad. Actualmente hay tantas opciones que cada vez me sorprendo descubriendo una nueva forma de llevarlo: calzones con telas especiales, la espectacular copa menstrual, esponjas naturales, toallas y protectores de tela, etc, etc, etc. Yo llevo una mezcla de 1 copa especial para deportistas con 4 toallas y 5 protectores de tela. Las cantidades y la forma de llevar el periodo son muy personales. La copa, por ejemplo, es chévere pero a mí me cansa a ratos. Los productos de tela son muy cómodos, pero tardan mucho en secarse así que hay que tener una buena reserva guardada. Por eso mezclar varios métodos es lo mejor.

3) Permítete descansar días antes de la llegada del periodo: una siesta de 20 minutos o más en las tardes desde 1 semana antes de la llegada del periodo te puede ayudar a reducir enormemente las molestias que sientes cuando sangras. Te vas a sentir más tranquila, con menos dolor y con más ánimos de llevar esos días. Yo nunca he sido mujer de siestas, pero si no sigo este consejo mi cuerpo me lo cobra días después.

4) Come bien: este consejo es lógico pero dejarte llevar por el impulso de comer dulces como si no existiera el mañana te hará sentir más malestar físico. Si tienes ganas de algo dulce, prepárate un postre natural o cómete una fruta. Es mejor pasar la ansiedad con frutas que con ultraprocesados.

5) Organiza tus actividades según la época de tu ciclo: dependiendo de tus ganas de salir, trabajar, crear o pensar, organízate. Cada época del mes despierta en nuestro interior algo distinto y con un poco de organización podemos sacarle el máximo provecho a cada una. Déjate llevar por tu instinto de mujer.

6) Cuida tu piel: este consejo es esencial para mí. Los cambios hormonales afectan nuestra piel así que cada época del mes nuestra piel requiere cosas distintas. Durante los días premenstruales hay que doblar medidas de limpieza para evitar la aparición de granitos y durante la ovulación la piel se pone extra sensible así que viene muy bien usar productos que calmen y refresquen.

Espero que estos consejos sean de gran ayuda para tu relación con la menstruación. Atrévete a darle una segunda oportunidad, sólo pueden ocurrir cosas maravillosas si lo haces.