Desinfectante de manos natural y zero waste

La ciudad es, cada vez más, un espacio sucio y parece ser que nadie es ajeno a la contaminación atmosférica, la basura y el ruido. La OMS calcula que más o menos el 95% de la población humana vive en espacios contaminados.

La industria cosmética quiere hacerle freno a la suciedad ofreciéndonos un montón de productos para la desinfección del cuerpo: los geles, aerosoles, talcos, jabones, shampoos, cremas dentales, etc que vienen cargados con compuestos que, supuestamente, van a eliminar el 99.9% de las bacterias y a mantenernos sanos y seguros.

El lema de los productos para la limpieza del hogar es similar, pues la publicidad se enfoca en resaltar sus cualidades antibacterianas y lo limpio que va a dejar nuestro espacio. Pero ¿alguna vez te has cuestionado cuál es el precio real que estamos pagando por estos productos ultra-antiscépticos? Es paradójico que, desde que estos productos entraron en la vida cotidiana de las personas, los virus y bacterias parecen ser más fuertes y resistentes que nunca. A nivel mundial hay una alarma médica por la resistencia a antibióticos, antiscépticos y otros biocidas.

Aunque es mayoritariamente reconocido el problema de la resistencia humana a los antibióticos que se encuentran en la carne y otros productos de origen animal y las súper bacterias que colonizan quirófanos, incubadoras y diversos espacios dentro de los hospitales, hay una tercera causa del aumento de este problema. Según un artículo publicado en el volumen 38 de la Revista Colombia Médica de la Universidad del Valle: "El uso de elementos para limpieza casera ha incrementado de modo notorio en los últimos años. Las sustancias antibacterianas añadidas a estos elementos son semejantes a los antibióticos en su acción y pueden apresurar la resistencia en ciertas cepas". Estos compuestos debilitan nuestro sistema inmunológico y nos vuelven más débiles contra estos parásitos y ponen en riesgo nuestra salud, por lo que muchos ya han sido prohibidos en la Unión Europea, Japón y Estados Unidos.

El triclosan, por ejemplo, es una sustancia que sirve como conservante en desodorantes, cremas dentales, jabones, geles antibacteriales y algunos alimentos. En Colombia está presente en ciertos de productos que encontramos en el supermercado y que después llevamos a casa. A pesar de que se usan "niveles seguros" para el contacto humano, con el tiempo este compuesto se acumula en el cuerpo y pueden causar graves problemas de salud. Un estudio de la Universidad de Massachussets reveló que este compuesto incluso se puede acumular en el cepillo de dientes y causar graves problemas de salud.
La FDA, el órgano que regula los medicamentos, la comida y los cosméticos en Estados Unidos, aseguró incluso que la efectividad de este y otros compuestos (como el triclocarbán y el formaldehído) no es cierta porque aún no se ha podido determinar su utilidad. Lo que sí es seguro es que estas sustancias, además de volvernos resistentes a virus y bacterias con los que hemos convivido durante miles de años, causan graves daños en el sistema endocrino y a nivel cognitivo.

Por eso, para el día de hoy, tenemos preparada esta entrada con una súper receta de gel antibacterial 100% natural y libre de compuestos que le hacen daño al organismo. Los geles antibacteriales son muy comunes y muchas personas llevan siempre uno en el bolso. Así que puede ser una excelente oportunidad para reutilizar algún envase y para buscar una alternativa más amigable con nuestra salud y la del resto de la naturaleza. Todos estos tóxicos llegan al agua en algún momento causando graves daños en la vida marina también.


Ingredientes:

• 100 ml de gel de aloe vera licuado (en este video te enseñamos a sacar tu propio gel de aloe vera de la penca de sábila).
• 15 ml de glicerina vegetal de aceite de coco (es muy buena para fijar el gel a las manos y que haga su efecto antibacteriano).
• 30 ml de vinagre de manzana puro (a nosotros nos encanta experimentar con vinagres de origen orgánico y estaríamos encantados de comenzar a venderlos también, ¿qué te parece la idea? Si no te gusta, no te preocupes, usa el que más te guste. Sólo fíjate que dentro de sus ingredientes no veas nada más que agua y manzanas).
• 25 ml de hidrolato de citronela o de nuestro Tónico Facial (que tiene un potente efecto antibacteriano).
• 10 gotas de aceite esencial de árbol del té.
• 10 gotas de aceite esencial de eucalipto.
• 1 cuchara de madera.
• 1 recipiente de vidrio o porcenala.

Procedimiento:

1. Mezcla muy bien el hidrolato o Tónico, el gel de aloe vera y la glicerina con una cuchara de madera.

2. Después, añade lentamente el vinagre y ve revolviendo.

3. Evita el uso de instrumentos de metal o plástico para que la acidez del vinagre no corroa su superficie.

4. Agrega los aceites esenciales mientras revuelves y almacena en un recipiente de boca estrecha para que sea fácil de aplicar o reutiliza un envase de gel antibacterial.

Puedes potenciar su efecto agregando 20 ml de vodka puro a la mezcla y un poco más de aceite esencial para disminuir el olor a alcohol. Este gel se puede usar varias veces al día en personas mayores de 3 años. Es muy bueno especialmente si vas a salir de casa y no tienes chance de entrar a un baño con agua y jabón. Deja las manos muy suaves y frescas y tiene un potente poder terapéutico.
 

Como ves, es una receta súper sencilla. Esperamos que la pongas en práctica y te animes a cambiar algunos productos de uso diario por una alternativa más ecológica y saludable. Si quieres ver más recetas ve a nuestro Instagram a leer nuestras publicaciones o revisa esta otra entrada que tenemos en el blog. Que tengas un 2020 consciente y pleno.