10 consejos para mantener un cabello sano y bello

Eso de que las pequeñas cosas hacen la diferencia es más que cierto, sobre todo cuando de nuestro cabello se trata. En una publicación de Instagram hablábamos un día sobre la similitud del cabello con una planta. ¡Y es que nuestras hebras tienen vida propia! El problema es que no entendemos su lenguaje y, por más que nos esforcemos, no vemos cambios sustanciales en su apariencia. Los productos que la publicidad nos presenta como milagrosos no pueden, por sí solos, ayudarnos a tener el cabello que soñamos (al respecto, consulta la entrada anterior para conocer un poco más sobre los compuestos que seguro tienen tus productos de cuidado capilar). Sabemos lo que quieres y te vamos a ayudar a conseguirlo, sigue estos consejitos, trata tu pelo con mucho amor y verás cómo cambia.

1. Sabemos que es más cómodo, pero tener el cabello recogido, y más en peinados muy apretados, puede entorpecer su crecimiento, hacerlo debilita la raíz y además puede provocar su caída prematura. Sin hablar de los dolores de cabeza y los problemas musculares que puedes experimentar a futuro. ¡Deja que tu melena sea libre como el viento!

2. ¿Crees que cepillarlo no tiene ciencia? Te equivocas. Debes hacerlo de medios a puntas, solo cuando esté seco y no con mucha frecuencia. Cuando está mojado es cuando está más vulnerable, tiende a romperse con facilidad. Sabemos que puede ser difícil esperar hasta que se seque, pero para evitar tenerlo súper enredado puedes cepillarlo antes de meterte a la ducha, y de una vez aprovechas y estimulas el cuero cabelludo para que reciba mucho mejor los productos que vas a aplicar. Cepillarlo con muchas frecuencia solo hará que se ponga frágil.

3. Si definitivamente no quieres dejar a un lado las planchas y secadores al menos asegúrate de que tu cabello se vea afectado lo menos posible, usa sin falta termoprotectores, el aceite de aguacate o el de nuez del Brasil son perfectos y además te deja el cabello súper brillante porque nutrirán tus hebras a profundidad. Puedes usarlos en una cantidad moderada 15 minutos antes de planchar el cabello.

4. ¡Córtalo para que crezca más! No es una locura. Si no lo cortas solo vas a conseguir un montón de puntas abiertas y dañadas. Cuando lo recortas vas a darle un respirito y va a crecer con mucha más fuerza. Y aprovecha estos cortes para conseguir los cambios que quieres teniendo en cuenta el ciclo lunar en el que te encuentras. Te recomendamos hacerlo cada 9 o 10 semanas. No tienes que ir donde un peluquero, atrévete a hacerlo tú misma, al fin y al cabo nadie te ama más. Si quieres que tu cabello crezca en un 2x3 despúntalo en luna creciente y hazlo en menguante para darle grosor y evitar que se caiga tanto.

5. El agua caliente no es nuestro mejor amigo. Aunque sabemos que es difícil renunciar a él, solo está haciendo que nuestro cabello pierda brillo, que aumenten las probabilidades de tener caspa y que se deshidrate y ponga quebradizo.Usa agua fría o a temperatura corporal. Aplica este mismo truco para cuidar tu piel.

6. Lavarlo más no va a ser que esté mejor. Es necesario dejar que los aceites naturales que secretan las glándulas del cuero cabelludo tengan tiempo de producir efectos. Puedes hacerlo cada 2 o 3 días. Tampoco es bueno exagerar y esperar 1 o 2 semanas para lavarlo. ¿Por qué? Porque las células del cuero cabelludo se renuevan más o menos 2 veces más rápido que las del cuerpo. Su ciclo es de unos 15 días y si no lo lavas con constancia acumularás un exceso de células muertas que pueden terminar en problemas de caspa.

7. Frotar el shampoo en tu cabeza no hará que quede más limpio, al hacerlo estás estimulando las glándulas sebáceas logrando el efecto contrario. Además estimularás la producción de queratinocitos y vas a notar que tu cuero cabelludo empieza a descamar. Haz masajes suaves cuando apliques cualquier cosa sobre tu cabello.

8. Es normal que el uso de productos convencionales para cuidar tu cabello te obligue a estar cambiando de marca constantemente porque "dejan de funcionar". Esto ocurre porque son productos con un porcentaje muy bajo de principios activos beneficiosos para tu cabello y están compuestos en su mayoría por agua y derivados del petróleo. Con las opciones de origen natural no tendrás este problema, si un producto funciona, ¡no tendrás que cambiarlo!

9. ¡Limpia tus utensilios! Tu cabello merece ser tratado con la mayor asepsia posible. En ellos se acumulan más grasa, bacterias y hongos de los que puedes imaginar. 

10. ¿Aceites? ¡Por favor! Si bien las mascarillas y los acondicionadores pueden mejorar ciertos problemitas, el tratamiento más efectivo que le puedes dar a tu cabello es con aceites. Por su composición penetran más fácil en el cuero cabelludo, equilibran el ph, sellan la cutícula capilar y además no tienes que comprar uno para cada problema que tengas, los aceites naturales tienen mil propiedades increíbles que le pueden dar una nueva vida a tu cabello y tu piel. 
    
    
    Envíanos un mensaje por Instagram contándonos cuáles son los consejos que agregarías tú o pídenos una asesoría sobre los mejores aceites para tu cabello. Durante estos días estaremos subiendo por allí mascarillas con distintos aceites, ¡y no te las puedes perder! Cuidar tu cabello no es misión imposible, sólo necesita amor, comprensión y ternura, ¡préstale la atención que se merece!